A lo largo de una sola jornada, seguro que pasan por tu cabeza cientos de pensamientos diferentes, las preocupaciones del día a día, las tareas que te quedan por delante… pensamientos que, cuando llega la hora de dormir, es difícil hacer desaparecer.
Por eso, meditar es algo que puede resultar tremendamente importante, y es que ser capaz de concentrarte para relajar tu cuerpo y tu mente no es tan sencillo como pudiera parecer.
Es necesario entender qué es la meditación y cuáles son las mejores técnicas para llevarla a cabo. Por eso en muchas ocasiones, preferimos acudir a centros especialistas en meditación para que nos ayuden y nos vayan guiando.
Sin embargo hay que reconocer que acudir a este tipo de centros no siempre es posible, ya sea por falta de tiempo o por no disponer de los recursos necesarios para ello. Así que si este es tu caso, estás de suerte, y es que a continuación en este artículo te voy a contar un secreto, te voy a desvelar cuales son las mejores técnicas de meditación en casa.
Aquellas prácticas de relajación con las que no vas a tener que salir de casa, simplemente tendrás que organizar tu agenda para tener unos minutos al día, algo que seguro que puedes lograr.
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¿Se puede meditar en casa?
Lo primero que debes conocer es si realmente meditar en casa es una opción viable, y es que depende de tu situación familiar o laboral, sacar unos minutos para ti puede parecer una tarea completamente imposible.
Pero lo cierto es que no vasa tener ningún problema, y que vas a poder poner en prácitca todas estas ténicas de meditación en tu hogar.
Son todas sencillas, apenas llevan unos minutos, y por eso son perfectas para realizar en cualquier rato libre que puedas sacar.
Piensa que los beneficios que vas a obtener merecen la pena, así que incluso puedes sacar un rato nada más levantarte o incluso antes de ir a dormir.
¿El resultado es el mismo que acudiendo a un centro de meditación?
Por otro lado también es interesante hablar de esto, de las diferencias que vas a encontrar entre acudir a un centro de meditación profesional, o realizar estos ejercicios en tu propia casa.
Es cierto que no es lo mismo ir a un lugar preparado para la relajación, un lugar en el que todo es paz y tranquilidad, que quedarte en tu casa e intentar encontrar esa paz y serenidad, sin embargo tampoco es algo imposible.
De hecho en cuanto adquieras una rutina vas a ver cómo te adaptas en seguida a practicar la meditación en casa, y ya no necesitarás nada más.
Las mejores técnicas de meditación en casa
Para poder meditar en la tranquilidad de tu hogar, hay ciertas pautas que debes seguir, todas ellas muy sencillas pero increíblemente útiles, que sin duda van a marcar la diferencia a la hora de poder lograr un estado de tranquilidad y paz interior.
A continuación descubrirás cuales son todos estos pasos, así que coge papel y boli para no perderte ninguno de ellos:
Encuentra un lugar tranquilo
Lo primero que debes hacer es encontrar en tu casa un lugar tranquilo, un lugar en el que puedas estar todos los días unos minutos a solas y sin interrupciones.
No importa qué lugar sea, simplemente asegúrate de que vas a poder contar con él a diario, puede ser tu habitación, la sala de estar… tan solo tienes que encontrar un rincón silencioso en el que puedas encontrarte a gusto.
Haz de ese espacio tu santuario
Cuando ya sepas cuál va a ser este lugar de la casa, debes hacer de él, un auténtico santuario para los sentidos.
Quizá creas que es algo difícil, pero todo lo contrario, a veces basta con encender un par de velas o una rama de incienso con tu olor favorito, y encender algo de música relajante que te haga sentirte bien.
Esto es muy importante ya que debes conseguir que ese lugar de tu casa, ese rincón tan conocido, se convierta en algo diferente, se convierta en todo un centro de meditación.
De ese modo vas a ser capaz de dejar los pensamientos del día a día a un lado, y comenzar a centrarte en ti y en tu meditación.
Acomoda tu postura
Una vez que ya tienes ese santuario y ha llegado tu hora de relajación diaria, debes encontrar la postura adecuada para que todas las energías fluyan libremente sin ningún impedimento ni barrera.
Por ello siempre se recomienda sentarse con la espalda muy recta, y sin cruzar ninguna extremidad, pero a la vez estando relajado.
Centra tu atención en un punto concreto
Si eres una persona a la que le gusta la meditación, seguro que sabes de sobra la importancia que tiene centrar toda tu atención en un punto fijo. Estando en tu casa puede ser algo complicado ya que cualquier objeto te puede traer recuerdos cotidianos.
Por ello una buena práctica es crear tu propio mandala, es decir, un dibujo normalmente geométrico que te va a ayudar a dejar la mente en blanco.
No necesitas nada muy elaborado, con tener una foto o una impresión de un mandala es más que suficiente para poder aprovecharte de todos sus beneficios.
Intenta dejar tu mente relajada
El siguiente paso consiste en dejar la mente todo lo relajada posible, intenta no pensar en nada ni agobiarte por tus preocupaciones. Ese momento es para ti, para dejar de pensar en todo y para simplemente relajarte y disfrutar.
Tampoco te agobies si ves que algún pensamiento invade tu mente, no lo rechaces, ya que eso solo te va a inquietar más, simplemente déjalo que fluya, sin profundizar en él, deja que se marche igual que ha llegado.
Poco a poco verás como tu mente se va relajando y va dejando de crear pensamientos y recuerdos.
Respira de forma consciente
Por último, intenta respirar de forma consciente, es decir, céntrate en tu respiración, en el aire que va entrando y saliendo de tus pulmones.
Y haz esto durante unos 5 minutos, verás que cuando abras los ojos te sientes mucho más relajado y lleno de esa serenidad y paz que tanto necesitas en tu día a día.
Hasta que no pongas en práctica esta meditación, no te darás cuenta de la gran importancia que tiene en tu día a día, lo mucho que necesitas en tu vida ese rato para ti, ese rato en el que poner en marcha todas estas técnicas de meditación en casa.
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